Vives con la descripción de -su mundo-, que es la realidad aprendida desde el nacimiento, la que cotidianamente se alimenta del sistema establecido. Posiblemente conoces poco -el mundo- que es la verdadera realidad, la que se rige por las leyes de la naturaleza y las de la evolución, y es también, la que contiene la legitimidad histórica (lo que realmente sucedió no lo que te cuentan). Tal vez, desconoces o no existe del todo -tú mundo-, aquella realidad que has conformado para ti, sin influencias externas.
No podemos considerar que –su mundo- y -él mundo- sean lo mismo porque caeríamos en un error de apreciación. A -su mundo- lo llamé de ésta forma porque no participaste en su creación, y tampoco es representativo del modelo real de la naturaleza, porque es convencional y artificial, pero es en el que vives diariamente.
En el devenir histórico nuestra cultura se fue conformando gradualmente bajo el modelo lineal de pensamiento, con el tiempo éste modelo fue madurando su contexto científico, filosófico, dogmático, tecnológico, legal y religioso; resultando una serie de valores, criterios, normas, estándares, y formas de vida; este contexto es el que ahora regula nuestra descripción del mundo.
-Su mundo- está conformado por convencionalismos y sistemas hechos por el hombre, nos han inventado una realidad aproximada que pretende ser exacta y natural. El sistema de vida que nos ofrece ésta cultura lineal es correcto sólo en apariencia, sus valores nos han mantenido en continuos conflictos entre los diferentes grupos humanos, estamos fatigando catastróficamente a la ecología del planeta, y las diferencias de la calidad de vida cada vez son más profundas. En –él mundo-, todos los seres vivos han encontrado su equilibrio natural y la estabilidad de energía en el patrón ecológico, menos el ser humano. Porque vive en –su mundo-.
Sucede que no utilizamos todavía el modelo correcto de la propia naturaleza, éste será reconocido y aceptado sólo cuando en un intenso acto de conciencia personal rechacemos el paradigma cultural lineal que nos tutela. El cambio se producirá en cada uno de nosotros por convicción propia y de acuerdo a la autenticidad lograda, por eso, debemos de esforzarnos para alcanzar nuestro propio equilibro, para vivir sin estrés, sin angustias, sin prisas, sin actitudes beligerantes, y evitando posponer nuestro bienestar padeciendo siempre por el incierto futuro que deseamos. Aprendamos a disfrutar la realidad presente, disfrutemos lo cotidiano con tranquilidad y entusiasmo, gocemos nuestros logros en paz, y amemos con armonía. Es tiempo de cambiar a un modelo de pensamiento más sano y real, así nuestra vida y trascendencia estarán mejor logradas.
La búsqueda de tú realidad:
Es importante ocuparnos de nuestra superación personal con ingredientes reales. No podrás desarrollar tus potenciales naturales ni tu autenticidad si la realidad convencional que te rodea la consideras como verdadera. Date cuenta de que vives en la fantasía de -su mundo-, desde ahí no puedes “ver” tu mundo, han recreado una ilusión a tú alrededor de cosas que debes tener, de modelos que debes seguir y de ideas que debes aceptar; todo esto emperifollado con colores, sonidos, aromas y sabores artificiales, premios mercadológicos, música pegostiosa, imágenes, sensualidad, sensiblería limosnera, violencia entretenida, sensacionalismo morboso, promesas y retórica convincente. Todo esto funciona para enaltecer tú ego y poder manipular tu voluntad.
Dentro de -su mundo- no es necesario pensar, todo está resuelto y digerido. Ahí, todo tiene un nombre, una descripción, una secuencia, una jerarquía, una parte y una contra parte; así que, simplemente acomodas los casilleros con la especificación del mundo que te han dado y a eso le llamas tú realidad. Inclusive nuestra psique tiene mecanismos de defensa que no aceptan otra certidumbre si no se ajusta a esa descripción aprendida. Esta es una de las razones por la que está frenado el proceso evolutivo de la consciencia humana, porque requerimos del esfuerzo de la conciencia de ser para nuestro desarrollo, lo resuelto solamente nos retrasa.
Para conformar –tú mundo- debes primero resolver tu autenticidad, encontrar lo que realmente piensas que eres y serlo. Para eso debes de saber separar lo real de lo aparente, no es tan sencillo, porque aunque comprendas perfectamente cuales son las diferencias, debes tener la experiencia de vivirlas, además, es necesario que actúes en consecuencia, no es suficiente con entender su teoría. Aprende a cuestionar lo más objetiva y fríamente -su mundo-, hazlo bajo la premisa de que todo es aparente o parcial, y que nada es auténtico.
-Tú mundo- es lo que has hecho tú directamente con tus circunstancias, porque actuaste en consecuencia de acuerdo a tú forma de pensar, eso asegura tú forma de ser, la suma de éstas acciones de autenticidad en el tiempo conforman -tú mundo-.
Probablemente estás pensando en que todo lo que te rodea ahora y tú forma de vida, han sido tu decisión, tal vez; pero lo más probable es que hayas concedido y aceptado -su mundo-, simplemente te adaptaste a las circunstancias, tus decisiones fueron hechas dentro del contexto de las alternativas que tenías enfrente, pero te aseguro que nunca creaste tus propias expectativas, solo tomaste las opciones resueltas; así que lo que tú crees y eres es aparente.
Las concesiones que hacemos:
Conceder ha sido parte de nosotros desde que nacimos. El término <
Para darte cuenta de las trampas del mundo en el que realmente vives deja de “conceder”, eres demasiado accesible y ese es el peligro. Permites que te inoculen necesidades hasta tú inconsciente, y por eso las aceptas.
Pongamos de ejemplo la televisión. El mantener tú atención visual y auditiva con imágenes, música, sonidos y diálogos te sumergen en un agradable “trance” de atención relajada, en donde tú filtro racional deja de funcionar, porque tú tarea de pensar a sido sustituida por un Mundo resuelto, en donde concedes todo lo que te comunican sin cuestionarlo, así lo aceptas inconscientemente. El uso de la fantasía y de lo irreal para “recrearte” es un truco para que permitas el engaño, con eso asimilas todos los mensajes ideados para convencerte de que consumas o para que tomes determinadas actitudes lineales. A esto le llamo “persuasión irreflexiva”, el inconsciente es muy accesible por su ingenuidad, él es el que se enamora, es él creativo, él que sueña, él no conoce el espacio-tiempo, ni el orden secuencial de eventos sucedidos. Pero el consciente sí reconoce lo irreal y los engaños, pero ante ésta inocente situación visual auditiva, tu capacidad racional no les da importancia porque sólo se está “entreteniendo”, al fin ¡sólo son fantasías! Así tú capacidad de “razonar” concede. Pero inconscientemente se ha quedado gravado el mensaje, ahora el inconsciente alineará el camino, y te impulsará continuamente hacia antojos, gustos, caprichos, ocurrencias, o deseos; que le fueron gravados subliminalmente, ahora le emociona “tener” lo que vio y escuchó.
De ésta forma aceptamos los modelos de comportamiento, los “estándares de vida”, los valores y nuestra filosofía existencial de –su mundo-. Por eso debes de empezar a reconocer cuales son las apariencias, y que es lo verdadero.
Redefine –tú mundo-:
Durante toda la vida debes de retroalimentar -tú mundo-, eso es inevitable. La vida es un proceso de cambios interminable, debes “crearte” y reinventarte en todos los sentidos. Y no es necesario esperar a hacerlo para cambiar esa actitud artificial ante la vida, nunca pospongas tu desarrollo, ni tus momentos de felicidad, dale a tu vida el poder, el vigor y el ánimo cada día que pasa.
Tu “momento de poder” no requiere de preparación alguna, aprovéchalo porque es en él que estás parado ahora, en ese instante mismo que lo piensas y te propones actuar en algo (lo que sea); exprésalo para ti con determinación, con coraje y avanza hacia eso ¡Ya! Nunca postergues tu felicidad y deleite de vivir como quieres, porque no lo estás haciendo con lo que piensas ahora.
La vida es como un cubo lleno de oscuridad, debes hacer el esfuerzo cada día por iluminarlo, porque sólo no se llenará, y conforme dejes de esforzarte, la oscuridad tenderá a ganar espacio; a veces muy rápido, a veces despacio, depende de la calidad de luz que forjaste con tú intento. Dale suficiente claridad a tú vida, para que te ubiques, para que puedas tomar consciencia de ser, para “ver” la realidad y para que puedas ser libre gracias a tu autenticidad; empieza a ser realmente feliz. Fluye con el orden natural de las cosas, disfruta el paseo que ganaste, actúa en consecuencia bajo tus convicciones propias, descarta la superficialidad de lo artificial y eso te hará una persona auténtica.
Tezcatl Iztac
http://tezcatl.wordpress.com/2009/04/02/articulo-tu-muerte-te-acompane/#more-105
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