martes, 20 de enero de 2009

EL TRAYECTO (SOMOS CHOFERES?)

Hola de nuevo:

Hace tiempo que no escribo las historias que me vienen al hemisferio derecho de mi cabeza.

Un tiempo atrás de varios años, estando en un atasco citadino, hice consciencia de la realidad circundante.

Observando a los conductores de los vehículos que me rodeaban, apareció la idea loca de que al igual que nosotros somos simples conductores de nuestros utilitarios, de la misma forma somos chóferes de nuestro vehículo carnal.

Me explico:

Nuestra existencia esta dividida en ciclos de vida. Estos ciclos de 7 años son transformaciones que bien nos hacen cambiar nuestra ruta o bien continuamos circulando por la misma ruta pero con otra consciencia. El libre Albedrío.

Imaginemos que nuestro cuerpo carnal es un coche que esta aparcado en Madrid. (pongo este ejemplo de lugar por ser mi ciudad de nacimiento) cuando se fabricó el coche, se le marco un objetivo; llegar hasta La Coruña.

El vehículo esta aparcado con las puertas abierta y las llaves puestas en la calle San Bernardo. De pronto entra al vehiculo, un Ser lo pone en marcha dirección La Coruña.

Al principio el vehículo como es nuevo, se tiene que adaptar: gasolina, cambios de marcha, roce de las gomas en el asfalto, el viento, la lluvia, las bocinas de los demás coches.

Este Ser, eligió el vehículo por sus prestaciones, velocidad, seguridad, consumo y mantenimiento.

Como en esa época no existían los aparatos electrónico que te indican la ruta más cómoda a tomar, el Ser tiene que intuir y memorizar el mejor camino.

Sale de Madrid. Durante el trayecto, el Ser para en diferentes lugares; visita amigos, conoce nuevos amigos, se alimenta, descansa y visita a otros Seres para pagarles deudas que tenia pendiente. En algunos casos, se desvía de la ruta para conocer nuevos lugares que le han recomendado.

El Ser no tiene prisa en llegar porque entiende que lo ideal no es llegar cuanto antes, sino llegar cansado de haber vivido nuevas experiencias.
Mientras el Ser y el vehículo van rodando por la carretera recogen a otros Seres que están haciendo dedo (auto-stop) estos Seres van llenando el coche hasta que no entra ninguno más en este caso, es un utilitario de cinco personas.

En cambio, hay otros vehículos que si aceptan más gente por que son de mayor capacidad. Cuando llevan varios kilómetros, el conductor decide estacionarse en San Rafael y deja a uno de los Seres que recogió por el camino el mando del coche.

El coche ahora tiene que adaptarse a la forma de conducción del nuevo conductor. Hace los cambios más bruscos, acelera mucho más consumiendo mas gasolina.

Mientras que este nuevo chofer esta manejando, ocurren varias situaciones que hacen peligrar la integridad del vehículo y de los demás Seres. Además discute con otros conductores y empleados de gasolineras. Es bastante odiado por otros choferes. El coche se deja llevar porque entiende que esa es su función, así fue diseñado y creado.

De repente cuando llegan a un pueblo de pocos Seres vivientes, este conductor decide abandonar el coche con los otros 3 Seres que hicieron dedo.

Los demás Seres, no hacen criticas de la forma de conducir de este otro. Prácticamente han estado durmiendo casi todo el viaje, además, para ellos no existe lo bueno ni lo malo, por lo tanto, no hay críticas.

Uno de los Seres decide conducir a su manera…

Durante el viaje van entrando Seres que necesitan llegar a su destino que esta en la misma ruta de La Coruña.

Así sucesivamente hasta que llegan a La Coruña. Puede solo llegar un Ser o varios Seres.

Este último Ser o Seres, deciden que como todavía esta bien el motor, aunque la carrocería no está en muy buen estado gracias a los golpes con otros vehículos, deciden, seguir con él por La Coruña hasta que deje de funcionar.

Fin del trayecto.

Esta es la metáfora que ese día en el caos vehicular citadino me vino al hemisferio derecho de mi cerebro.

Sinceramente, creo que durante nuestro trayecto en esta dimensión, somos chofer y vehículo.

Realmente somos más de un Ser:
Pensamientos: acompaña a los choferes. Saben donde y como quieren llegar.
Chofer: el Ser que acompaña y conduce a su manera el vehículo.
Vehículo: el cuerpo que alberga este y otros Seres junto con sus Pensamientos.

Era tal tapón que estaba viviendo ese día que me permitió seguir meditando esta historia.
Me trasladé a cuando era niño, joven y demás estado de consciencia. Y no me reconozco en absoluto. Pareciera que en esa época, eran otras personas distintas a la que soy Aquí y Ahora.

Situaciones que viví y que me sorprenden como pude actuar de esa manera.

Alguien puede decir que es fruto de la edad y del medio en el que uno vivió ese ciclo.
Claro! Pero inclusive Aquí y Ahora hay momentos durante el día que no se corresponden con el sentir y el actuar del otro día. Uno se acostó a dormir y cuando se levanta al otro día su actitud es otra distinta de la que fue el día anterior y para ayudar a entenderlo el Ego busca justificaciones por lo tanto siempre creemos ser el mismo.

En una de mis meditaciones al SANTUM CELESTIAL visualice otros Seres, a cual más diferente, que estaban a mi lado. Sentí que eran choferes que esperaban entrar en mi para conducir el cuerpo.

Mi humilde opinión, es que somos más de uno y no se trata de personalidades múltiples.

Algo curioso que he sentido, es que con la experiencia que el vehículo adquiere al ser conducido por varias manos (Seres). Hace que se cree un nuevo Ser. Un Ser que tiene parte de la personalidad de los conductores y también parte del vehículo.

Un paréntesis:
((Existe la fatiga tecnológica o mecánica. Cuando alguien tiene o está en contacto durante un tiempo con una máquina, ésta máquina adquiere parte de su Aura o Astral y se crea algo…(no se el que es, pero siento que casi tiene vida o sentimiento de bajísima vibración)

De pensamiento, hice la prueba y desde ese día agradezco a las máquinas su trabajo. Nunca las insulto por que un día no me funcionen. Al otro día sin poner las manos, esa máquina funciona.))

Volviendo al tema del Ser que se crea gracias a las experiencias de otros Seres, creo en ello y me atrevo a decir que pudiera ser el cuerpo Astral.

Por último; creemos que en nuestro cuerpo solo existe un solo Ser. Pero siento que no es así. Nuestro cuerpo simplemente es el vehículo de otros Seres que deciden viajar en él y conducirlo por un determinado tiempo espacio.
Sin ser conscientes de ello, también, somos creadores de un Ser con otro nivel de vibración.

Bueno… vaya charla cibernética, menos mal que no me da por escribir muchas veces.
Sería insoportable!!! Leer mi blog.

Como regalo de haber llegado a esta última línea les dejo con este video.

Que lo disfruten

SALUD∆∆∆