NARRACIONES PSÍQUICAS
Amigos míos es urgente aprender a viajar por entre la Cuarta Dimensión. A muchos les parecerá difícil tal aprendizaje, empero esto no es así tan trabajoso; lo que se necesita es fuerza de voluntad, tenacidad incansable y paciencia infinita.
Vienen a mi memoria en estos instantes algunos episodios muy importantes relacionados con los estados de Jinas. Cuando yo comencé mi aprendizaje, ciertamente tuve que sufrir un poco. Me acostaba tranquilo en el lecho con la cabeza apoyada sobre la palma de la mano izquierda; me concentraba en mi Madre Naturaleza y en el Cristo rogándole de todo corazón me llevara con cuerpo de carne y hueso a remotos lugares de la tierra; cuando me sentía ya en cierto estado de lasitud, cuando empezaba a dormitar, suavemente me levantaba de la cama y salía al patio de la casa; allí daba saltos largos con la intención de flotar en el espacio; muchas veces estaba lloviendo y entonces tenia que soportar el agua y el frió; vestido con ropa de dormir y luego al ver que no flotaba, me regresaba a la cama para repetir el experimento una y otra vez incansablemente durante toda la noche; mis desvelos eran enormes, mi cuerpo se estaba adelgazando, mi rostro estaba pálido y mis ojos llenos de grandes ojeras de tanto desvelo, pero yo era terco y un día de esos tantos, obtuve el éxito.
En estado de somnolencia me levanté del lecho y grande fue mi asombro al encontrar tres damas dentro de mi recamara; una de ellas me ayudo a levantar de la cama, mientras las otras dos ante una mesa echaban suertes con unos naipes; haber cual de ellas se hacia cargo de mi insignificante persona; es ostensible que la suerte recayó sobre la que me levantó del lecho; ella me ayudo a salir del cuarto, me condujo a lo largo de un corredor que conducía hasta la calle, abrió el portón de la casa y me saco a la calle; entonces vi a muchas otras personas que igualmente estaban ocupadas en la misma labor en aquel poblado, donde a la sazón vivían.
La dama en mención me dijo que podía flotar en el ambiente y al hacerlo sentí gran alegría; no desconozco que hubo cierta falta de prudencia en mis actos, pues tan pronto lleno de alegría me lanzaba a las nubes como me precipitaba a la tierra para volar sobre las casas, las torres de las iglesias, etc. etc.
1.- ¿Y no lo veía nadie?
R.- ¡Oh! distinguida dama, de cierto le digo que nadie me veía porque mi cuerpo se había metido dentro de la Cuarta Dimensión, se había escapado del mundo de tres dimensiones y por eso se había hecho invisible para las gentes de este mundo.
La dama me llevó a Nueva York; allí había un caballero que también estaba trabajando en la misma forma; aquella mujer lo ayudo también y lo saco de su apartamento, de manera que ya fuimos dos los viajeros de la Cuarta Dimensión. Atravesamos el Océano Atlántico y luego volamos sobre Europa pasando por distintas ciudades en ruinas, pues estábamos en la segunda guerra mundial.
Aquel hombre me dijo: no sé que veo en ti, pero lo único que se es que dentro de ti mismo hay mucho de filosofía y mucho de ocultismo; yo le respondí, ciertamente soy ocultista y esoterista y me llamo SAMAEL AUN WEOR; el caballero me advirtió sobre los peligros que existían en las tierras de Europa; me dijo que tuviéramos mucho cuidado porque si llegábamos a salirnos de la cuarta vertical, caeríamos en esos países sin documentación de ninguna especie, por lo cual nos asesinarían o nos meterían a la cárcel; tiene usted razón, le respondí, de ninguna manera debemos abandonar la cuarta coordenada.
Durante el trayecto nos detuvimos unos instantes para entrar en una casa de modistas. La dama que nos conducía nos manifestó el deseo de ayudar a algunas personas que allí vivían, entre tanto nosotros permanecíamos dentro de una habitación contigua, platicando.
Cuando salimos de aquella casa con nuestro guía, seguimos flotando sobre el cielo de Europa para llegar hasta el lugar donde nos proponíamos. Una vez hechas las investigaciones requeridas me despedí de mi guía y del amigo y regrese a casa.
Ya ven ustedes distinguidos amigos y amigas como con voluntad y paciencia pueden ustedes aprender a meter su cuerpo físico dentro de la Cuarta Dimensión; A mi esto me costó como un año de amarguras.
2.- ¿Cómo sabía el guía que en esa casa que usted menciona, necesitaban ayuda, y que tipo de ayuda?
R.- Con el mayor gusto responderé a su pregunta, estimada dama. Es claro que las personas que vivían en tal casa eran amigos del guía; la ayuda que prestó la dama que nos guiaba se relacionaba con los estudios Jinas, tenia por objeto ayudar a una persona a entrar en la Cuarta Dimensión; eso es todo.
3.- ¿Que tanto tiempo estuvo usted haciendo ese viaje?
R.- Bien, distinguida señora, considero que en ir y venir pudo haber transcurrido un par de horas.
4.- ¿Cómo supo regresar solo?
R.- Esta pregunta es muy interesante y da oportunidad para una hermosa explicación. Sucede que en el mundo de la Cuarta Dimensión todo regresa a su punto de partida original; Si abrimos una puerta, esta se cierra de inmediato por sí misma; Si llevamos un objeto de un lugar a otro, este retorna por sí mismo a su lugar.
Por ejemplo: en cierta ocasión salí de la casa por entre la Cuarta Dimensión; me situé exactamente a una cuadra de distancia y luego me quité la camisa de dormir, la tiré al espacio y observé cuidadosamente el curso que ésta seguía; Entonces vi con asombro que flotando tal objeto en la atmósfera regresó a casa, penetró por la puerta y fue a dar al lecho.
Así, pues, no es extraño el que yo me dejara llevar por la fuerza del retorno para regresar en forma, dijéramos, instintiva y automática al dormitorio hasta quedar el cuerpo colocado en la posición en que antes estuviera.
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lunes, 25 de mayo de 2009
martes, 20 de enero de 2009
EL TRAYECTO (SOMOS CHOFERES?)
Hola de nuevo:
Hace tiempo que no escribo las historias que me vienen al hemisferio derecho de mi cabeza.
Un tiempo atrás de varios años, estando en un atasco citadino, hice consciencia de la realidad circundante.
Observando a los conductores de los vehículos que me rodeaban, apareció la idea loca de que al igual que nosotros somos simples conductores de nuestros utilitarios, de la misma forma somos chóferes de nuestro vehículo carnal.
Me explico:
Nuestra existencia esta dividida en ciclos de vida. Estos ciclos de 7 años son transformaciones que bien nos hacen cambiar nuestra ruta o bien continuamos circulando por la misma ruta pero con otra consciencia. El libre Albedrío.
Imaginemos que nuestro cuerpo carnal es un coche que esta aparcado en Madrid. (pongo este ejemplo de lugar por ser mi ciudad de nacimiento) cuando se fabricó el coche, se le marco un objetivo; llegar hasta La Coruña.
El vehículo esta aparcado con las puertas abierta y las llaves puestas en la calle San Bernardo. De pronto entra al vehiculo, un Ser lo pone en marcha dirección La Coruña.
Al principio el vehículo como es nuevo, se tiene que adaptar: gasolina, cambios de marcha, roce de las gomas en el asfalto, el viento, la lluvia, las bocinas de los demás coches.
Este Ser, eligió el vehículo por sus prestaciones, velocidad, seguridad, consumo y mantenimiento.
Como en esa época no existían los aparatos electrónico que te indican la ruta más cómoda a tomar, el Ser tiene que intuir y memorizar el mejor camino.
Sale de Madrid. Durante el trayecto, el Ser para en diferentes lugares; visita amigos, conoce nuevos amigos, se alimenta, descansa y visita a otros Seres para pagarles deudas que tenia pendiente. En algunos casos, se desvía de la ruta para conocer nuevos lugares que le han recomendado.
El Ser no tiene prisa en llegar porque entiende que lo ideal no es llegar cuanto antes, sino llegar cansado de haber vivido nuevas experiencias.
Mientras el Ser y el vehículo van rodando por la carretera recogen a otros Seres que están haciendo dedo (auto-stop) estos Seres van llenando el coche hasta que no entra ninguno más en este caso, es un utilitario de cinco personas.
En cambio, hay otros vehículos que si aceptan más gente por que son de mayor capacidad. Cuando llevan varios kilómetros, el conductor decide estacionarse en San Rafael y deja a uno de los Seres que recogió por el camino el mando del coche.
El coche ahora tiene que adaptarse a la forma de conducción del nuevo conductor. Hace los cambios más bruscos, acelera mucho más consumiendo mas gasolina.
Mientras que este nuevo chofer esta manejando, ocurren varias situaciones que hacen peligrar la integridad del vehículo y de los demás Seres. Además discute con otros conductores y empleados de gasolineras. Es bastante odiado por otros choferes. El coche se deja llevar porque entiende que esa es su función, así fue diseñado y creado.
De repente cuando llegan a un pueblo de pocos Seres vivientes, este conductor decide abandonar el coche con los otros 3 Seres que hicieron dedo.
Los demás Seres, no hacen criticas de la forma de conducir de este otro. Prácticamente han estado durmiendo casi todo el viaje, además, para ellos no existe lo bueno ni lo malo, por lo tanto, no hay críticas.
Uno de los Seres decide conducir a su manera…
Durante el viaje van entrando Seres que necesitan llegar a su destino que esta en la misma ruta de La Coruña.
Así sucesivamente hasta que llegan a La Coruña. Puede solo llegar un Ser o varios Seres.
Este último Ser o Seres, deciden que como todavía esta bien el motor, aunque la carrocería no está en muy buen estado gracias a los golpes con otros vehículos, deciden, seguir con él por La Coruña hasta que deje de funcionar.
Fin del trayecto.
Esta es la metáfora que ese día en el caos vehicular citadino me vino al hemisferio derecho de mi cerebro.
Sinceramente, creo que durante nuestro trayecto en esta dimensión, somos chofer y vehículo.
Realmente somos más de un Ser:
Pensamientos: acompaña a los choferes. Saben donde y como quieren llegar.
Chofer: el Ser que acompaña y conduce a su manera el vehículo.
Vehículo: el cuerpo que alberga este y otros Seres junto con sus Pensamientos.
Era tal tapón que estaba viviendo ese día que me permitió seguir meditando esta historia.
Me trasladé a cuando era niño, joven y demás estado de consciencia. Y no me reconozco en absoluto. Pareciera que en esa época, eran otras personas distintas a la que soy Aquí y Ahora.
Situaciones que viví y que me sorprenden como pude actuar de esa manera.
Alguien puede decir que es fruto de la edad y del medio en el que uno vivió ese ciclo.
Claro! Pero inclusive Aquí y Ahora hay momentos durante el día que no se corresponden con el sentir y el actuar del otro día. Uno se acostó a dormir y cuando se levanta al otro día su actitud es otra distinta de la que fue el día anterior y para ayudar a entenderlo el Ego busca justificaciones por lo tanto siempre creemos ser el mismo.
En una de mis meditaciones al SANTUM CELESTIAL visualice otros Seres, a cual más diferente, que estaban a mi lado. Sentí que eran choferes que esperaban entrar en mi para conducir el cuerpo.
Mi humilde opinión, es que somos más de uno y no se trata de personalidades múltiples.
Algo curioso que he sentido, es que con la experiencia que el vehículo adquiere al ser conducido por varias manos (Seres). Hace que se cree un nuevo Ser. Un Ser que tiene parte de la personalidad de los conductores y también parte del vehículo.
Un paréntesis:
((Existe la fatiga tecnológica o mecánica. Cuando alguien tiene o está en contacto durante un tiempo con una máquina, ésta máquina adquiere parte de su Aura o Astral y se crea algo…(no se el que es, pero siento que casi tiene vida o sentimiento de bajísima vibración)
De pensamiento, hice la prueba y desde ese día agradezco a las máquinas su trabajo. Nunca las insulto por que un día no me funcionen. Al otro día sin poner las manos, esa máquina funciona.))
Volviendo al tema del Ser que se crea gracias a las experiencias de otros Seres, creo en ello y me atrevo a decir que pudiera ser el cuerpo Astral.
Por último; creemos que en nuestro cuerpo solo existe un solo Ser. Pero siento que no es así. Nuestro cuerpo simplemente es el vehículo de otros Seres que deciden viajar en él y conducirlo por un determinado tiempo espacio.
Sin ser conscientes de ello, también, somos creadores de un Ser con otro nivel de vibración.
Bueno… vaya charla cibernética, menos mal que no me da por escribir muchas veces.
Sería insoportable!!! Leer mi blog.
Como regalo de haber llegado a esta última línea les dejo con este video.
Que lo disfruten
SALUD∆∆∆
Hace tiempo que no escribo las historias que me vienen al hemisferio derecho de mi cabeza.
Un tiempo atrás de varios años, estando en un atasco citadino, hice consciencia de la realidad circundante.
Observando a los conductores de los vehículos que me rodeaban, apareció la idea loca de que al igual que nosotros somos simples conductores de nuestros utilitarios, de la misma forma somos chóferes de nuestro vehículo carnal.
Me explico:
Nuestra existencia esta dividida en ciclos de vida. Estos ciclos de 7 años son transformaciones que bien nos hacen cambiar nuestra ruta o bien continuamos circulando por la misma ruta pero con otra consciencia. El libre Albedrío.
Imaginemos que nuestro cuerpo carnal es un coche que esta aparcado en Madrid. (pongo este ejemplo de lugar por ser mi ciudad de nacimiento) cuando se fabricó el coche, se le marco un objetivo; llegar hasta La Coruña.
El vehículo esta aparcado con las puertas abierta y las llaves puestas en la calle San Bernardo. De pronto entra al vehiculo, un Ser lo pone en marcha dirección La Coruña.
Al principio el vehículo como es nuevo, se tiene que adaptar: gasolina, cambios de marcha, roce de las gomas en el asfalto, el viento, la lluvia, las bocinas de los demás coches.
Este Ser, eligió el vehículo por sus prestaciones, velocidad, seguridad, consumo y mantenimiento.
Como en esa época no existían los aparatos electrónico que te indican la ruta más cómoda a tomar, el Ser tiene que intuir y memorizar el mejor camino.
Sale de Madrid. Durante el trayecto, el Ser para en diferentes lugares; visita amigos, conoce nuevos amigos, se alimenta, descansa y visita a otros Seres para pagarles deudas que tenia pendiente. En algunos casos, se desvía de la ruta para conocer nuevos lugares que le han recomendado.
El Ser no tiene prisa en llegar porque entiende que lo ideal no es llegar cuanto antes, sino llegar cansado de haber vivido nuevas experiencias.
Mientras el Ser y el vehículo van rodando por la carretera recogen a otros Seres que están haciendo dedo (auto-stop) estos Seres van llenando el coche hasta que no entra ninguno más en este caso, es un utilitario de cinco personas.
En cambio, hay otros vehículos que si aceptan más gente por que son de mayor capacidad. Cuando llevan varios kilómetros, el conductor decide estacionarse en San Rafael y deja a uno de los Seres que recogió por el camino el mando del coche.
El coche ahora tiene que adaptarse a la forma de conducción del nuevo conductor. Hace los cambios más bruscos, acelera mucho más consumiendo mas gasolina.
Mientras que este nuevo chofer esta manejando, ocurren varias situaciones que hacen peligrar la integridad del vehículo y de los demás Seres. Además discute con otros conductores y empleados de gasolineras. Es bastante odiado por otros choferes. El coche se deja llevar porque entiende que esa es su función, así fue diseñado y creado.
De repente cuando llegan a un pueblo de pocos Seres vivientes, este conductor decide abandonar el coche con los otros 3 Seres que hicieron dedo.
Los demás Seres, no hacen criticas de la forma de conducir de este otro. Prácticamente han estado durmiendo casi todo el viaje, además, para ellos no existe lo bueno ni lo malo, por lo tanto, no hay críticas.
Uno de los Seres decide conducir a su manera…
Durante el viaje van entrando Seres que necesitan llegar a su destino que esta en la misma ruta de La Coruña.
Así sucesivamente hasta que llegan a La Coruña. Puede solo llegar un Ser o varios Seres.
Este último Ser o Seres, deciden que como todavía esta bien el motor, aunque la carrocería no está en muy buen estado gracias a los golpes con otros vehículos, deciden, seguir con él por La Coruña hasta que deje de funcionar.
Fin del trayecto.
Esta es la metáfora que ese día en el caos vehicular citadino me vino al hemisferio derecho de mi cerebro.
Sinceramente, creo que durante nuestro trayecto en esta dimensión, somos chofer y vehículo.
Realmente somos más de un Ser:
Pensamientos: acompaña a los choferes. Saben donde y como quieren llegar.
Chofer: el Ser que acompaña y conduce a su manera el vehículo.
Vehículo: el cuerpo que alberga este y otros Seres junto con sus Pensamientos.
Era tal tapón que estaba viviendo ese día que me permitió seguir meditando esta historia.
Me trasladé a cuando era niño, joven y demás estado de consciencia. Y no me reconozco en absoluto. Pareciera que en esa época, eran otras personas distintas a la que soy Aquí y Ahora.
Situaciones que viví y que me sorprenden como pude actuar de esa manera.
Alguien puede decir que es fruto de la edad y del medio en el que uno vivió ese ciclo.
Claro! Pero inclusive Aquí y Ahora hay momentos durante el día que no se corresponden con el sentir y el actuar del otro día. Uno se acostó a dormir y cuando se levanta al otro día su actitud es otra distinta de la que fue el día anterior y para ayudar a entenderlo el Ego busca justificaciones por lo tanto siempre creemos ser el mismo.
En una de mis meditaciones al SANTUM CELESTIAL visualice otros Seres, a cual más diferente, que estaban a mi lado. Sentí que eran choferes que esperaban entrar en mi para conducir el cuerpo.
Mi humilde opinión, es que somos más de uno y no se trata de personalidades múltiples.
Algo curioso que he sentido, es que con la experiencia que el vehículo adquiere al ser conducido por varias manos (Seres). Hace que se cree un nuevo Ser. Un Ser que tiene parte de la personalidad de los conductores y también parte del vehículo.
Un paréntesis:
((Existe la fatiga tecnológica o mecánica. Cuando alguien tiene o está en contacto durante un tiempo con una máquina, ésta máquina adquiere parte de su Aura o Astral y se crea algo…(no se el que es, pero siento que casi tiene vida o sentimiento de bajísima vibración)
De pensamiento, hice la prueba y desde ese día agradezco a las máquinas su trabajo. Nunca las insulto por que un día no me funcionen. Al otro día sin poner las manos, esa máquina funciona.))
Volviendo al tema del Ser que se crea gracias a las experiencias de otros Seres, creo en ello y me atrevo a decir que pudiera ser el cuerpo Astral.
Por último; creemos que en nuestro cuerpo solo existe un solo Ser. Pero siento que no es así. Nuestro cuerpo simplemente es el vehículo de otros Seres que deciden viajar en él y conducirlo por un determinado tiempo espacio.
Sin ser conscientes de ello, también, somos creadores de un Ser con otro nivel de vibración.
Bueno… vaya charla cibernética, menos mal que no me da por escribir muchas veces.
Sería insoportable!!! Leer mi blog.
Como regalo de haber llegado a esta última línea les dejo con este video.
Que lo disfruten
SALUD∆∆∆
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